Cuando el alimento de la flor de la conciencia
rastrilla las ciudades enloquecidas, frenéticas
enmohecidas por un vago sentimiento
de autosatisfacción
cuando los lamentos afganos
resucitan al son de un hibisco
al son de muchas rapiñas guardadas en almacenes
mustios
ordenaré que en Jindrichûv falseen los amaneceres
deslinden con los muertos, excépticos, dudosos,risueños, graníticos
y entonces la xenofobia cruzará los tercos ríos
y los almacenes con dinamita
y el mismo segregacionismo torcerá
las insulsas praderas de la mentira,
retorciendo cada vez los gritos ahogados de seres federados
porque sabes a donde ir, que la angustia te modifica, te retuerce en una mueca híbrida
a conciencia de la flor de los alimentos
a conciencia del resquemor de las paredes lijadas
en prestancia
para que amar y a tan ligadura de trompas
en los síncopes y surrealistas indicios
de planos mas elevados