Ben-.

Refugiados-.

Aquí se quedaron mis pies

desahuciados por el hielo,

invitándome a no parar quieto

cuando los pesticidas vuelan

tan alto. Aquí permanecieron

mis ancestros, hojas de cal y acanto,

miseria y un tanto por ciento,

porcentajes del sueño por construir

una casa. Los huesos a los que pertenezco,

formarán espejos indeseables, en los

que reflejarme, a pesar del vértigo.

Y los años, y las fórmulas, y las sombras

perdidas de tantos hijos nonatos?

Estarán conmigo; bajo mi pecho

refugiados.

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