Quiso la barca abandonar su playa
y marchar a otras arenas.
Quiso hacerlo sin avisar a nadie,
quiso dejar al marinero en tierra...
en tierra salada, en tierra muerta,
pero sobre todo ...en tierra de ausencias.
¡Marinero, marinero¡...
¿que buscas entre las peñas?,
¿entre las rocas y el mar?
¿entre la brisa y la niebla?.
Busco el olor de mi barca,
busco el frescor de su estela...
busco las luces que el alba
ponía sobre su vela;
busco mi razón perdida y
sobre todo...la busco a ella.
¡Marinero, marinero¡
no podrás borrar tu pena...
ya no embarcarás jamás...
serás marinero en tierra
que a ti solo te quedó
ir muriendo tras de ella.
J.C.