El amor, es como un aguacate madurado por los rayos del sol de poniente. Es semejante al silencio del amanecer en el alma... Es parecido, a la mirada tierna y cálida, salida de los ojos del niño de escasos meses, dispensada desde su cuna de amor. El amor, es la verdad y la mentira en justa unión, para lograr soportar momentos de soledad, y algún que otro dolor que la vida nos aporta sin solicitarlo. El amor, es en ocasiones, esa lágrima que se une al río de la vida, para desembocar más tarde -si procede-, en el mar de la pasión. ¡Sentimientos unidos por eslabones de oro, cuando es verdadero!!. Es en definitiva, alegría e ilusión, que dimana de dos seres unidos por los mismos sentimientos, que logran activar las palpitaciones de sus corazones, que han estado cerrado por reformas.