A ti que siembras utopías
sastrecillo valiente
que recortas el mundo
lo hilvanas, lo pruebas
y lo ajustas a tu medida.
A ti que eres tu propia epifanía
te manifiestas al mundo
diciendo yo soy. yo estoy
y pronuncias tu nombre,
y transformas las cosas
y recreas lo cotidiano
y escribes la historia