¿Quién le dio trabajo al loco de cupido?
¿Quién le permitió tener más de mil razones?
Alguien le dio un arma a ese ángel herido
y le regalaron de diana nuestros corazones.
¿Quién le dio permiso para cometer errores?
que se busque un parque si quiere jugar,
que vaya a juntarse con los otros impostores,
y deje de darme motivos para discrepar.
Tengo ganas de pensar, que tengo el control,
de mi vida y mi locura ser yo la dueña.
Tengo ganas de escapar, poner mis culpas a tomar el sol,
y después de tantas decepciones, ser yo quien sueña.
Tengo algo de inocencia guardada bajo candado,
usé tanto mi fe que se me gastó.
Duele ser auténtica, y tener al mundo enojado,
duele retomar el tiempo cuando se perdió.
Demasiadas máscaras ocultando a la gente,
que constantemente te golpean solo porque sí,
y mientras cupido de idiota tira la flecha imprudente,
solo para que algún inepto sea feliz por tí.