Esta noche te velaré el sueño y no podrás escapar,
tanto silencio que ya hasta se me hizo de más.
No me pidas que me calle,
no me pidas que te bese desde lejos,
no soy lo que tu eres y sin embargo, te quiero.
Hacer hincapié a las tardes aquellas,
tú jovial y yo sin más
te pertenecí sobre la banca,
teníamos dieciséis, con poco talento
frente a frente tu y yo
¡Ay qué nervios sentí yo!
Jugaré a la maquina del tiempo,
reviviremos las tardes a solas,
las miradas blancas,
tan perdidos de amor, tan callados
¡Qué bonito es recordar!
Esta noche me fumaré tu ausencia,
aquel recuerdo al que le huyo y aún así regresa.
No me pidas que me calle,
no me pidas que te bese desde lejos,
no soy lo que tu eres y sin embargo,
te quiero.
Bea Ramírez
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