Daniel Memmo

Me arriesgo...

Me arriesgo..,

intentando no llamar la atención,

evitando el tumulto de la muchedumbre,

aplastados cómodos en sus sillones,

juzgando, orando, llorando desde su prisión,

me arriesgo..,

al destierro del pulgar para abajo,

de los elogios exagerados,

a la idiotez de la normalidad de ser distinto,

especial..,

como si el mundo cortará su cables cuando tú te mueras,

bello velatorio virtual tendrás,

en directo y muy ensayado,

buscando en el falso llanto la monetización,

me arriesgo..,

a dejar para siempre la costumbre de extrañarte,

convertirme en un viejo orgulloso,

un hombre nuevo lleno de esperanza mostrando mi barriga como protesta,

por el hambre en el mundo,

me arriesgo..,

al miedo de perder mi estupidez,

de ser ejemplo de los ganadores soberbios,

de que me adjudiquen medallas al mérito,

me arriesgo..,

de ser ignorado como a la muerte,

creyendo en la inmortalidad y la desgracia ajena,

deseando que el mundo sea a tu semejanza,

hundiendo la nariz en mi ombligo,

buscando el respeto por mi llanto,

me arriesgo..,

al ataque violento de palabras mal escritas,

al joven viejo con flequillo recita como salmo,

versículos de resentidos que la vida le dió solo dinero,

al orgulloso esclavo que se jacta que su amo lo empobrece y lo castiga por amor,

me arriesgo..,

a terminar en la vidriera por un precio vil,

de buscar en la quema mi dignidad,

preocuparme por no salir en la foto de los adelantados,

que juzgan como dioses la miseria ajena,

me arriesgo..,

señalando un color..,

y los ciegos respondiendo..,

 sepia!!!

cómo mi ojos!!

 

     Daniel Memmo