Te amo con tu sonrisa pegada al rostro
que contigo me tomo el mosto
de las caricias.
Te quiero alegre siempre que no hay motivo
Para tristezas que hay agostos
anuncios de primaveras y de otoños.
Te amo porque te quise al ver tu absorto
rostro
tu boca es como un manjar hecho de abrojos
y tu eres el cerrojo que cierra las puertas de mi asombro.
Por favor quédate junto a mi apoya tu cara junto a mi hombro
en la escuálida simpleza de mis antojos.
Tu eres el devenir y yo soy el porvenir que hay en tus ojos.
Ojos pardos para beber el agua pura y resolver todas las dudas que veo entrever en tus alvéolos.
Te amo por el placer de amarte sólo por el deber y quererte por el tener tu vientre arqueólogo.