Embriagada
Anoche, qué derroche de aventuras
no consagradas,
me di miles de volteretas
apretando a mi almohada,
deseé hasta morderla de placer,
porque afuera llovía
y a ti no te podía tener,
fueron instantes tan intensos
que al sentir el amanecer
que abrigaba los instantes,
no pude hacer otra cosa
que dar vueltas en la cama.
Bañé mis ganas con tus recuerdos
y comprobé de nuevo
¡Cuánto por tí suspiraban mis ansias de amante!
NellyCastell