Investigué el lado oscuro de tu cuerpo.
Y salí investigado.
Me escondí de tu ávida sombra.
Y me devoró tu cuerpo.
Exploré tus collados.
Y me perdí.
Buceé en tus restringidos mares.
…Me recibió, tu flora virgen.
Cuando te infiltras… en mi mente.
Y describo tu ternura.
En estas líneas dementes.
Y en tu corazón… no perduran.
Me doy cuenta… que soy un tonto.