Amante de mi vida, siempre en mi mente
Pensamiento esclavo, querer y no poder
Evitando la burla, de alguien que miente
no queda luz, donde me pueda esconder
Alma indomable, células de la conciencia
Que el viento las trae, creando mi locura
Mañanas eternas, madrugadas frenéticas
Solo mustias palabras, salen de mi pluma
Estampas invernales, jornadas miserables
Mutilado corazón, soledades sangrientas
Ignorando aún, el por qué de ser culpable
Obligado a vivir, soportando la tormenta
Muerte sombría, con gabán y abrigo largo
Excluído al averno, no lo evitan en el cielo
Tendencias de hierro, sinsabores amargos
Efigie de mármol, depredador de océanos
Emociones persistentes, sonrisas y lágrimas
Moribundas realidades, antiguos recuerdos
Cansancio en la cara, naturaleza de dramas
Futuro intranscendente, al barro de nuevo