ubik

EL POETA Y LOS DUELISTAS INVIDENTES

Si el cielo desciende

y ha untado de rodillas mis pies

para qué copiar el ruido exacto

de la última página viva

 

o confundir la ceguera misma

con el maquillaje caníbal de Tántalo

antaño cauce seco de la voz

que incitaba al duelo

 

la realidad teje espejos en la brisa

para asombro de los ciegos

porque el reino proceloso

del verdadero sentido

es suyo

y nadie lo hereda por sorpresa