Ahora es cuando todo duele.
Ahora es cuando todo cambia
y deja un sinsabor que asciende
a la garganta del alma,
la incertidumbre hiende
en el vacío mismo de donde brota
el espectral silencio que ensordece
la miserable forma de mi hábitat.
Todo mi entorno es un caótico mosaico
que absorbe la sombra que ahora arroja
las sobras y pedazos de mi alma.
Ya mi cuerpo es muñón de lo que era
y decae, acelerando el vértigo,
como abatido por la nada.