Se desnuda en tu labio mi pecho ya dormido
y mis ojos se cierran
y mi voz se adelgaza
cómo se escurre leve tu mano en mi entrepierna
te desnudas entonces bajo la sombra
de mis ojos agrestes
ante el bosquejo íntimo de una noche callada
Y desnudos entonces en el oscuro cuarto
sólo la sombra de tu cuerpo
bajo el influjo de aquél oscurantismo
el jadeo imperioso del gemido constante
y tu respiración muy cerca de mi oído
sé que el orgasmo es tuyo
y el placer sólo mío…
Porque desnudos fuimos silencioso momento
sudores que se juntaron
nombres que no sabemos.