INMERSO EN TURBULENCIAS
Inmerso en turbulencias desatadas
hoy me encuentro, y tanto me aprisiona
esta jungla tan lejos de las hadas
que siento la pereza me abandona.
No hay estrellas, no hay luz y no hay moradas
que puedan aliviar; nadie perdona
el calvario dispuesto en ensenadas,
mas sé la cobardía no me abona.
Dispongo de una pluma que sujeto
descargando su tinta en borrador
y así poder sembrar el gran aprieto,
aquél que ya se irá por perdedor
al tiempo con un grito bizcoreto:
¡Doy gracias por la fuerza en mi interior!