Deslizar la cuota mayor de asombro
estornudos
vírgenes sedientas de penes
penes asustados
y las piedras bailan en puentes sin arnés
mujeres cobardes, hombres asustados
un mundo asombrado
tiempos que se estiran, mañanas quejumbrosas
y esas montañas inexploradas
arrecifes de vaginas dormidas
platos de ceviche transmutados a reír
plácidamente en morgues tibias