[\"Usant à l’envi leurs chaleurs dernières, / Nos deux coeurs seront deux vastes flambeaux, / Qui réfléchiront leurs doubles lumières / Dans nos deux esprits, ces miroirs jumeaux.\" La Mort des amants.- Charles Baudelaire.-]
Mucho antes de que sangres esa herida,
La habrás sanado.
Sin que te decidas a arribar, el tren
Ya estará en la otra estación.
Quizás por eso la angustia dura
Lo que una prisa tardía, un titubeo,
Una inyección de novedosa tristeza.
Quizás por eso no traigo pañuelos
Esta noche de luna pícara-
Pensativa, vacilante, charlatana-
Y las fotos se deshacen en relámpagos
Como queriendo borrar vestigios,
Acusando lo voluble y lo corriente
De tanta magia, por fin nuestra.
Quien seas responde a lo que hagas,
(Ça va, j\'en comprends les pourquoi).
Yo no soy así; soy quien soy siendo
(Un redoble libertario de tautologías)
Y en este darme a bocajarro en frondosas bendiciones
O en cebolla cruda y rotosa podredumbre;
También soy esta oscuridad bien prolija y hacendosa,
Siempre lista para ennegrecer pronósticos
Y sacarle compasión a los dolores;
Y este inconsciente bien piola
Que sólo sabe meter la pata
Hasta dejarme manco y que me crezcan alas.
Gozo a voluntad y deseo de mi propia sombra.
Desnúdate ya frente a mí, verdad a medias,
Mentira piadosa pero destemplada.
Este acre calor sin tu cuerpo
No es más que otro cadáver
Encaramado a nuestros hábitos.
Mientras miramos nuestras manos,
Los muertos que somos esperan impacientes
Salir a jugar un ratito.