¡ Que viejo es el traje
que alberga nuestro cuerpo !
Que bello el estilo
que procura mantenerlo.
Que triste la despedida
de los que no me siguieron,
que fácil es volar
sin alas ni cuerpo
haciendo piruetas
en el espacio eterno.
Que corta la vida
después de sabernos
mirando ese traje
tan suave y lozano
cuando recién nacemos.