I.SALAS

Suspiros del Alma

¿Soy o no soy?

cuestionase mi alma cada día.

Acompaña al Rey Astro

en su despertar cotidiano

con su incesante preocupación

¿Seré yo, o culpable quizás

de una burda actuación?

No encuentra respuesta

y prefiere por la mañana

en claustral silencio meditarla

hasta que exhausta 

de encerrarse en su ser

vuelve, cual espesa niebla

a aparecer.

Aprovecha los últimos 

rayos de sol

para frente a un espejo mirarse
¿Es este mi rostro.

mi verdadera faz, 

o una pesada careta

que me es imposible arrancar?

Y llora, llora el alma mía 

desconsoladamente,

buscando verdadera plenitud 

cada mísero día. 

Mas aún cuando el cielo

de oscuro se tinta

y alrededor brillantes

danzan estrellas tímidas

 se encuentra mi alma

 en oscuridad sumergida.

Ella sola, sin nada más

únicamente con un Dios

que la puede escuchar.

Y un fuerte impulso siente

un enorme amor ardiente

extasiada grita con voz fuerte

¡Padre, que cuántas capas

llevo,  tu consigas quitar

pues es deseo mio ferviente

parecerme a tí y no a nadie más!