En secreta confesión de poemas,
cuento que sin sujetar mi zapato
escribí resbalándome en el hiato
sin salpicarme de barro y esquemas
Era feliz tergiversando temas
de tejado en tejado como gato,
las nueve vidas las maté en un rato
¡Qué importaba métrica y sus problemas!
A cualquier cosa que me conmovía
recuerdo soltar correa y ladrar
¡atento a todo lo que se movía!
Pienso si me debería escapar,
ahora que soneto es guardería
pues quiero en árbol, mi marca dejar...
Luis. Angel Castillo Aguirre
Los Derechos Reservados // 15-03.2021 //
Foto tomado de Red