¿Me ofreces por mi codicia?
¡Caricia!
¿Son marcas en una piedra?
¡De hiedra!
¿Riegas en mi infiel terreno?
¡Veneno¡
Entre pecado y lo bueno
quitas mi aliento de santo
pues afirmo que es tu encanto,
¡Caricia de hiedra y veneno!
...
¡Tropecé en la misma piedra!
Logró aroma intoxicarme,
dulce me enriedas como hiedra
y no dejas de besarme.