Quiero hacer una fogata
para que nos calentemos
mientras tú cantas.
Afina bien la guitarra
que la noche es larga,
escucharé la serenata
mientras la cigarra
nos acompaña
con su sinfonía destemplada.
Yo me muero vida mía
por tenerte entre mis brazos,
mientras la leña arde
arderemos en nuestro fuego,
saldrán besos chispeantes
de nuestro amor delirante.
No nos daremos cuenta
que la noche nos besa,
mientras nos entregamos
alma y cuerpo fundidos,
arderemos hasta calcinarnos
en la hoguera del delirio.
el viento hace espirales
con el humo que sale
de nuestro fuego encendido,
ese fuego que nos consume
sobre la grama
que nos sirve de cama.
Aunque nos piquen los mosquitos,
aunque se suban las hormigas
por nuestro cuerpo impregnado
de las mieles del deseo,
sigámonos amando.
Aunque el pasto esté mojado
y se nos empape hasta el alma,
sigámonos amando.
Aunque nos aturdan las cigarras
con su estruendoso concierto,
sigámonos amando
que ya en la madrugada
todo estará consumado.
Felina