No insistas,
amor.
Tiempo atrás
te busqué.
El rostro bello
y la sonrisa
los rompiste tú,
amor.
Instantes
hechos
ceniza
que hoy se rebelan
contigo.
Tu guerra,
igual que todas,
es estúpida;
no sirve cerrar
los ojos
para huir.
Quédate,
amor,
no insistas.
Tiempo atrás
me perdí
y hoy
renuncio,
seré
un hombre solo,
alguien
cuya
vida
fuiste tú,
amor.