Vi cosas parir bajo la Luna, cuando la Luna es redonda y vaga bajo las axilas de la noche, cuando el cielo se viste con su traje de viudo. Es entonces, mientras nosotros transitamos la ceguera, que ella es, será una hembra luminosa. Vi un avión penetrar el centro de la luna como el espermatozoide lo hace con el óvulo y fecundar al instante una moneda de plata grabada y luciente delante de mis ojos.
Vi la vara recién florecida del gladiolo nacer entre las espadas de sus hojas y mutar sus pétalos hasta volverse tenues como velos.
Vi el perfume del jazmín corporizarse más perfume para llamar a los insectos.
Bajo el paraguas abierto de la noche, la luna alumbró, alumbra un mundo de clausura. Y el milagro es, fue, será, para los que vagan en silencio. (de mi libro \"No lugares y otros territorios\" El Mono Armado, 2018)