Michele Cristian

Cayendo

¿Como puede ese ardiente fuego,
que órgano palpitante en cenizas dejò,
seguir quemando?

Aunque dolor y agonía,
que al fuego poco a poco le dolìa,
parecìa soportar.

Y de a veces tu te aparecìas.
Pasadizos, escaleras, aulas.
Y recuerdo vago del cielo escarlata,
aunque sangrando estaba. !Aparecìa!

Mariposas volando hacia un nuevo destino,
Colores calurosos de mil besos recibidos.
La pluma llorando... y una turbulencia.

La realidad chocò,
pero no era novedad.
Preguntas sin respuestas,
dudas, solo esas.


Sentimientos no correspondidos,
que al tiempo le he pedido.
¿Caìda asegurada?
Tu decides.
¿O no?