Besos prohibidos
Resguardados en la oscuridad.
Y entre de mojadas hojas
Plasmó la pasión que en aquella
Superficie corporal desató
Entre besos alucinógenos
Envolviendo su cuerpo con el firmamento.
Presuncio su libertad desnudándose
Al resplandor de los astros.
En mi piel dejó rastro
En cada beso, me hizo preso
Al Argon de sus coloradas mejillas
Y me estremece al oír su cansado
Aliento.
Esa noche pude ver más estrellas
Anidando en sus ojos
Que en la superficie del mar.
Hasta pude devorar su alma
En cada partícula que me dejó
En mi pellejo.
Me sumerge en su superficie oceánica,
Cai en su arrecife corporal,
Llegando a navegar en el estrechó
Que habita en su pecho.
Ojos azules claros como el cielo.
Dónde mi alma tomá vuelo
Y cómeto el pecado de probar la manzana
Prohibida.