Distintos caminos nos dibuja el destino
si el alma lo ordena, ¡cállese el adivino!
en los presentes el pasado y de futuro
en sus andares me fundo,
río y maduro
Cortase en mil trozos la cadena pesada
lo que un día fue lazo y hoy es ancla oxidada
quien ama no lastra;
empuja erige y ensalza
quien ama obedece en su dulce esperanza
De que todos los bienes virtudes y gozos
acompañen tu marcha, decoren tu sueño
lo alto en si mismo esconde todo el sustento
Hoy
este día
a tus treinta y cinco febreros
prometo izarlo, poner todo el empeño
y tu dicha y la mía
sean único aliento