En tan sólo una décima de segundo todo acaba y todo empieza.
Ayer, mientras te soñaba a mi espalda, descubrí que el amor sí puede con todo.
No somos más que átomos que cruzan galaxias, y saltan de estrella en estrella con tal de volver a estar juntos o al menos, llegar a rozarse de nuevo.
Volviendo de la luna, hay que encontrar el punto de entrada <> exacto para atravesar la atmósfera y conseguir aterrizar...
-soñaremos e intentaremos despertar en perfecto estado-
(El Chivo)