En aquellas tinieblas que observamos
y que con nuestros oídos escuchamos
los monstruos, con sus grandes cadenas,
te hundiran hasta el fondo del infierno que has creado.
Ellos, con sus enormes y poderosas cadenas del material más resistente
y sus afiladas garras
te estancaran te atraparan.
Tan difícil es huir o enfrentarse
que muchos optan por la benevolencia: abandonar la tierra
O viven resignados, abandonados, insensibles a su propia consciencia.
Muy pocos valientes venceran a la gran bestia.