FERNANDO NOVALBOS

CUANDO REGRESES

CUANDO REGRESES

 

Cuando regreses de tu anochecer templado,

las hojas de los árboles serán guirnaldas de ensueño.

Tus ojos reflejados en la hierba,

la cola del cometa que recorre el cielo,

una alcoba de enseres tu pecho habitado,

fluir del resurgimiento la mañana,

como la simetría del recorrido,

como labios que habitan la historia de un beso.

Para cuando regreses, corazón de mis manos,

un dulce secreto hilaré a ti con hilo rojo,

una noche de luna estrellada,

descendiendo por la baranda donde susurra tu nombre el viento,

una flor que emerge de la luz,

este amor sediento que sangra de miedo si un día te vas de mi lado.

Para cuando regreses, a modo de bienvenida,

dame tu voz,

yo te desearé dulces sueños, para que camines bajo el sol alumbrado.