Me pides que escriba de mi puño y letra
y es lo que intento desde aquel día
en que nuestras almas
encontraron un punto en común
entre el sentimiento y el verbo.
Crearte en metáforas y símiles
es como anunciar un: TE CIELO
en medio de formas verbales
con adjetivos en superlativo
pero sin comparación.
Escribir un: TE AMO ,
sería vivirte en esa gramatical
dirección de la plomada
y en otros horizontes,
serías en letras ese aire penetrante
en forma no personal
ajustando morfemas y conjugación de la lengua;
La lengua, otro motivo para escribir
pero no en el papel.