Me gusta ser peregrino,
y aunque no siempre camino,
mi alma siempre lo hace:
Y en las noches sin colores,
busca nuevos amores
... y se recrea con besos
en cristalinos manantiales,
¡me olvido de los mortales!
Son muchachitas que aman
a las almas vagabundas,
y para enamorarlas
tienes que saber volar;
ellas te pueden llevar
al sol... a la eternidad,
todo consiste en desprender
... tu materialidad.
Y recorro con mi amada
por las arenas claras,
nunca marcamos caminos
... igual, somos peregrinos.
Jamás dejamos huellas
y así nadie sospecha,
pues siempre se nos encuentra
durmiendo un profundo sueño.
Y así yo he amado
a las más hermosas damas,
y aunque no toqué sus carnes
... si toqué sus pensamientos;
y es más importante eso:
Quedar en el sentimiento
y no morir unido
a su mortalidad.
xE.C.