Me excita la muerte muy hecha
la pantalla es un sin Dios
que sube la apuesta
dejándome la innombrable vocación
del impostor
por entretener la verdad
busco la indiferencia
que no puedo asimilar
mediante la expresión más vacía del universo
para que el poema se escriba solo
y sea tan real
como su imposible escritura
que sabe a voz cruda
al reservarme
la cólera del significado
ilusoria comunicación
que conmueve dementes ausencias