Eres la pasión extrema de mis vértices mas complejos
y bordeas las curvas de mis pliegues
con extremo descaro,
suave,
y a la vez abrupto, que mueve mi mundo.
Hasta donde pude saber que tú estabas,
yo viaje,
viaje sin descanso por caminos inusuales,
con sus malezas,
y madreselvas abandonadas
creciendo sin mesuras, con su natural espesura
allí,
yo te encontré,y el tiempo pasa
y sigues aún perenne,
como fruta de su tiempo o tiempo silvestre
en una carrera que nunca termina
pues este amor tan grande no visualiza las divisiones,
que separan los márgenes.
Siempre ganan los mismos en esta carrera
porque su bello arte no se extingue
ni hay fuerza mayor que pueda apagarse
ni de mil formas sencillas, o abstractas,
aun sabiendo que el alto precio siempre se paga.
Por eso, sigo pintándote en este lienzo
de mi propio mundo
allí tan adentro,como una exposición
del pobre que no vende,
y no le importa, ni por casualidad,
pero regala su amor,
sin nada que no sea amar,como las malezas,
ofrecidas a los márgenes
y enmarañadas en las nuevas primaveras
venideras
y llegarán nuevos poetas, nuevas ideas
sembrando de amor las madreselvas
Mientras;
Espero sin desesperarme
en la selva virgen de tus besos
allí siempre agazapado,esperando que nunca marches
pues entonces sabría que algo falló dentro de mi.
Nunca me lo perdonaría.