Cuchillos y pergaminos
Hipotecan las camas
Afilados y carcomidos
Son la biografía más cara.
De mis polvos sabáticos
de mis orgías consagradas.
De los traslados de mi mente
Al escaño de ninguna perorata.
Al embargo de las ingles suculentas
En la religión sucinta de la madrugada
En los santos de cientos de tacones
Que defribilan el santuario de mi alma.
Revólveres y desesperación
fluctuan en el estriptease de sus miradas.
El hot stuff desequilibra la habitación.
Coloniza de piel las lacónicas sábanas.
El blues es hielo en rayo hendido.
las paredes son yonquis empedernidos
Que abogan por su redención.