Besar tu piel centímetro a centímetro,
besar tus intimidades sorbiendo
beso a beso tu piel,
dándote placer sorbo a sorbo,
libando la ambrosía
del orgasmo, gimiento
-tú y yo en el tálamo-
entre éxtasis
estremecidos.
En tus pechos mis labios
sintiendo tú la esencia
del exquisito dardo.
(De la verde alameda
óyese un trino...
Un pajarillo
cubre a su amor.)
(Salvador)