Mi almohada no para de preguntarme
Cuando ella te volverá a escuchar.
Mi peluche me reclama
el porque ya no lo hablo de ti.
Mis gatos se sienten raros
Porque me acuesto temprano a dormir.
Incluso hasta mi cama te extraña,
Creo que hasta ella se acostumbro a escucharte hablar,
Que ahora no se siente comoda.
Ayer las paredes me preguntaron que pasaba,
Pues de hace tiempo que ellas no ocultan nuestro amorío.
Y a cada una le dije los mismo,
Les dije que tu no estabas y que dejaran de preguntar...
Porque ya me bastaba con que el corazón
Todos los días me lo hiciera recordar.