Cuando el miedo cubre todo mi ser… Y siento que el dolor no puede doler más, cierro los ojos y dejo que todo pase sobre mí, como si no pudiera pelear…Como si lo que fue bonito no podría volver a serlo. Cuando… Me duelan los pies de tanto caminar y mis labios estén secos… No lloraré cariño.
Para reconstruir un corazón… Se necesita más que cinta adhesiva… Se requiere sonreír, para que mañana salga el sol. Para que las hojas de los árboles en invierno, no flaqueen y caigan arrastradas por la gravedad.
Para olvidarme de ti y para también poder olvidarme de mí, se necesita abrir los ojos, para ver que no iríamos a ningún lado.
Para reconstruir un corazón, he soñado cariño, que te quiero, que aunque me vaya lejos pensaría en ti, que me dueles cuando no me dueles, que tus manos son tan suaves, que… No dijiste eso que haz dicho y que mañana vendrás con besos para pedirme que te disculpe.
Y eso es lo que he soñado, lágrimas que derraman pedacitos de ambos, un poco de nuestro recuerdo, un poco de tu alma y de la mía, cariño.
Que me quede tu perfume en la ropa, que arrugues mis camisas siempre que vengas a verme a casa, que se escuchen tus sollozos en la habitación del lado, que te vea en algún bus o en la calle y si no puede ser así… Que te lleven lejos.
Por que para reconstruir un corazón… básicamente preciso no verte.