Me miro al espejo y acaricio mi rostro,
veo un anciano dentro de un cuerpo de un niño,
el reloj de arena se ha caído ahora, está roto,
mis claros pero oscuros ojos apenas revelan brillo
en los contornos de mis pupilas agrietadas por el tiempo.
En este mundo incluso en días de verano parece ser invierno,
mis manos de caen con cada aliento que doy no las estoy sintiendo,
¿Acaso mi cuerpo se desvanece poco a poco como polvo al soplo del viento?,
prefiero dejar de respirar y soñar en una sueño y reales,
cerrar los ojos ante un mundo lleno de ambigüedades.
Ya me cansé de soñar en un mundo de pesadillas,
ya me cansé de soñar en un mundo si no es contigo,
no puedo soportar tanto dolor, no puedo negar beber de este agua,
incluso si es veneno,
incluso si estoy muriendo.
Siempre que me despierto de un sueño,
prefiero seguir cerrando mis ojos,
si es esto una pesadilla,
prefiero no despertar jamás.
Hace tiempo que olvide la identidad de mi persona,
exhalo un aliento no procedente de mí.
Lo siento, cariño, lo siento, cariño,
pero ek tren está a punto de marchar.
Me siento como una novela vacía,
sin una historia que contar
ni personajes que narrar,
una letra de una canción con puñaladas de tinta,
emborronando las lágrimas de mi sudor.
... Al final de un día agotador, soy incapaz de dormir me falta el aire y la voz para continuar.