Poemas de Pepita Fernández

No pude acariciar tu cansancio

Hoy me quedé con ganas de acariciar tu cansancio

 

 Tu mirada muda apenas latía

con ausencia de destellos en aquella lejanía,

quise hablarle, pero apenas respondía

 y mis manos en la distancia inalterable

perdieron esa dicha de tocarte.

 

Hasta el silencio se adueñó de tus pupilas

sentía que podía besar tus palabras

que mi magia pudo robarte una sonrisa,

que hasta el verso asomó en tu pecho

 y pude colgarme de él sin prisa.

 

Todo lo pude, pero existía la distancia

por eso me quedé con tantas ganas

de acariciar tu cansancio en este día.