He encontrado la razón
de ese sueño tan constante,
de ese suspiro que sale
sin saber cómo pasó;
y la encontré en el amor
que en mi corazón late
sin que nada la rebase
pues su fuerza es muy feroz;
se escondía atrás de un nombre,
de una inolvidable fragancia,
de una cabellera, un escote,
de una silueta, de un alma
y eres tú que me respondes
quien alienta mi esperanza...