Me encantas corazón,
La verdad,
Me fascinaría ensalivar tus delicados bellos,
Ser parte de ellos,
Recorrer tu cuerpo,
Sin prisas, lento,
Sin correr, tomarte firme
Suave, tierno,
Abrupto, con tiento,
Sentir tu delicada piel,
Tu delicado ser,
Probar tus labios,
Sabor a miel,
Y es que es real,
Me encantas, me fascinas
Me encanta tu cuerpo,
Tan lindo, tan sensual,
Eres tan pasional,
Que me encantaría deslizarme
Por tu piel mojada
Que rico sería,
Saborear el néctar
Que da vida,
Que resuena con eco
Y que me deja ciego,
Me encantaría ensalivar tu tesoro,
Saborear hasta la última gota,
Absorber tu esencia,
Romper con mi decencia,
Declararte mi demencia,
Pues quiero sentirte en el vaivén,
De este tren, que va directo a la pasión,
Quizá bajo la luna,
En la playa,
En la arena,
Con velas,
Una manta,
La suave brisa,
El champagne,
Y el sudor de nuestros cuerpos
Sí corazón, no lo dudes,
Sabes que me encantaría,
Hacerte el amor,
Como nunca habías imaginado,
Quizá no tendré un doctorado
En hacer el amor, pero,
Se que te volverías loca al unirte a mi
¿Y sabes que seria lo mas rico,
De hacer el amor contigo?
. . . Que nuestra forma de amar,
No se limita a lo terrenal,
Sería lo mas excitante
Lo más elocuente, complaciente
Y al sentir mi vaivén
En tu monte de Venus
No harías más que abrazarme
Y no soltarme
Hasta saciarte,
Pues tu temor de amarme,
Habrá cedido al conquistarte. . .