En aquella noche,
Estabas tu ahi tumbada,
Contemplando las estrellas,
Que aunque fueran bellas,
No te superaban.
Todos a ti te querian,
Pero no habia manera alguna,
De estar junto a ti mirando la luna.
Pero aquella noche,
Que estaba en una torre,
Para contemplarte a ti,
Tu me pedistes de estar alli,
Junto a ti y a tu cariño,
Para pasar la noche contigo.
Aquella noche fue la cura,
De la gran locura
Que se desataba en mi,
Y que sentia por ti.