El fénix se vuelve a sumergir
Y en los gigantes de roca
Los solitarios cantan su vuelta
Ahí donde las miradas del cielo se posan
En el lienzo sus ojos acompañantes se vuelven arte
Ahí una sombra se posa
Es tan dinámica , tan sutil
Entre los algodones se posa
y a los vaivenes verdes sonroja
con donaire su entrada de luz
Es natural su giro de aquel parteluz