Cristina Carbajal

Un año, nueve meses y cinco dias

 

 Les contare mi historia:
Mi familia era la mejor
que podia aver tenido,
pero en esta
se  desmorono despues de
un acontecimiento
terrible que nos cambio
a todos.

Mi padre, mi hombre
perfecto,
mi voz a seguir
estaba en aprietos
y en un lugar
que a nadie le
gustaba.

En la penitenciaria
lo peor que a mi
familia podria
destruir.

A nadie le gustaba
ir a la vicita semanal
eran los sabados
peores pasados en mi
vida.

Era orrible tantas
personas formadas
para estar con esa
persona especial,
que dentro de este
lugar encarcelado
entaba.

Dolia ver como
tantas personas
despertaban en la
madrugada para ir
a la vicita y allarce
con la mala sorpresa
de que estaban castigados.

Como ancianas ivan a
la vicita de sus hijos
o de sus maridos,
ver como niños ivan a la
vicita con su papa
o su hermano.

Y yo tambien iva
con mi padre esa
persona que fue mi idolo.

Pasaron muchas cosas
en mi vida y el no estaba
sabia que me queria pero
me faltaba.

Pasaron tantas
reconstruciones
del delito y aun que
nunca supe cual era
se que culpable
el no era.

Tantas veces que
lo fui a ver
era orrible
ver tanto sufrimiento.

Tantos hombres perdidos
culpables o no tanto,
tantas persona que su
vida maracada siempre quedaria.

Tantas veces que nos
ilucionaba que
decian que ya iva
salir de ahy i al fanal
ya no.

La ultima vez que nos
dijeron ya no sabiamos
si creer o no.

Y asi llego
un año, nueve
meses y cinco dias
y por fin se acavo la
pesadilla.

El libre era y nosotros
tambien. Felices
eramos sin darnos
cuenta que cambio.

El afectado estaba
y yo tambien
el se alejo de la
familia y todos tambien.

Antes de que el saliera
en el vicio del cigarro
entre y la tomadera
tambien,
cuando mi padre salio
yo me libere de todo
ese vicio dañino para
mi ser.