Cuentasueños
Este cuento no es como todos los cuentos, no tiene un comienzo tradicional.
Trata este cuento de una chica que, en lugar de usar caperuza roja, decidió por un gorro frigio de pico alto al estilo medieval, un poco para ir en contra del viento que las modas imponen en su afán comercial.
Tan rebelde era la chica que no quiso saber de palacios, ni de bosques, ni de cesta con pasteles que llevarle a ninguna abuela para merendar.
Y decidió muy soberana hacer uso de su derecho a usar el libre albedrío que otros aires le habrían de reparar.
Era su sueño cambiar de paradigmas y poder ser protagonista sin ser en ningún momento víctima en otro cuento con diferente argumento y con diferente final.
Y con la idea que sería muy bien protegida por el viejo Morfeo en su nueva empresa, recogió sus macundales y a la manera de un trotamundos gitano, a su sueño dio rienda suelta por un camino de nubes pavimentado.
El leñador que la vio por los límites del bosque muy decidida a cambiar de set y de escenario, se atrevió a preguntar:
Por los lados de un lugar de ensueños donde habita una cantante de nombre Shakira, al menos he de hallarme uno que no sea tan embustero… Que sea mudo, sordo y ciego.
Moraleja del cuento: La que usted quiera asignarle, solo que hoy día lobos sordos, mudos y ciegos, solo en los cuentos o en las canciones.