tu mente es círculo fino,
cuadrado firme,
paso a paso te marchas
sin despedirte.
resistís a mi llanto
aunque no quieras,
y entiendo que no sos vos.
es tu cabeza.
te veo apagarte lento
y, como arena,
tu versión del pasado
se ve disuelta.
mas por favor, no temas,
sabés que yo estoy.
los cuentos que me contás
los escucho hoy.
yo puedo ser tu ancla,
ya lo he probado.
sentí este abrazo suave,
vení a mis brazos.
sé que si volás lejos
de este cruel mundo
habrás dejado huellas
en lo profundo.