Grande es mi preocupación contigo
tomas como agresión lo que te digo
me duele tu actitud para conmigo,
¿Es qué quieres infligirme castigo?
Mientras yo, al que te maldice, maldigo
al que te desdeña sin más, fustigo
con la firmeza del amor, hostigo
y para tu estabilidad litigo.
Yo tan solo quiero tener tu abrigo
tu sabes que por nada me fatigo
y al que te bendice yo le bendigo
De mi lealtad el mundo es testigo
y cuando a veces muy poco consigo
ni reproches, ni culpas yo prodigo.
Soy esposo y amigo
te amo y a quererme yo no te obligo
pero nunca, de amor, seré un mendigo.