...Cuánta dignidad tiene su condición
Cuán humano es su semblante y sus escamas
Quién sabrá la respuesta de su santa absolución
No importan su sombrero ni su saco
Tal vez sí su mirada oblicua de ave
Porque es posible sentir malestar en las entrañas
Cuando se exige una explicación
A pesar que la respuesta se anticipa con un amargo silencio
Son más las preguntas que las afirmaciones que nos diste
Más apretado el puño al dormir y al despertar
Ante la imagen que expusiste del hombre
Somos nosotros tus hermanos
Los desposeídos de dignidad para ingresar a tu morada
Donde la tolerancia de dolor y del quejido
Te era más propicia
Tal vez sea insuficiente preservar tus ideales
Por la presencia de los ídolos supremos
Los mismos que gracias a tu fe sufrieron ser humanos
Poeta de la vida y del hombre
Tú pensaste en nuestra raza y nuestro cobre
Recordado y bendecido de este mundo hastiado...